Autor: Manuel Azabal
Disco: Buenos días Señor, buenas noches Señor

Oí tu voz que desde niño me llamó,
oí tu voz y la seguí sin comprender,
oí tu voz y la seguí como Samuel,
tú me guiaste, mi Señor,
oí tu voz, oí tu voz.
Gracias, mi Señor, por mi vocación,
la sembraste Tú y fructificó;
fue tu suave luz la que me guió,
por eso mi voz te quiere decir:
gracias, mi Señor.
Uso sugerido:
Misas Vocacionales o Jornadas de Oración por las Vocaciones:
Esta canción es ideal para celebraciones dedicadas a orar por las vocaciones al sacerdocio, a la vida consagrada, o al servicio laical comprometido. Puede cantarse durante el momento de acción de gracias o como canto final, expresando gratitud por el llamado recibido.
Ritos de Profesión Religiosa o Renovación de Votos:
En celebraciones donde se realiza la profesión de votos o su renovación, esta canción puede acompañar el momento en que los consagrados expresan su respuesta generosa al Señor. La referencia a Samuel hace que sea especialmente conmovedora y apropiada.
Ordenaciones o Instituciones Ministeriales:
Durante ordenaciones diaconales, presbiterales, o celebraciones en que se instituyen ministros laicos (lectores, acólitos, catequistas), este canto puede ser parte del rito o del momento de acción de gracias, subrayando la iniciativa de Dios en cada vocación.
Retiros Discernimiento Vocacional o Llamado al Compromiso:
En retiros donde se invita a los jóvenes a discernir su vocación o compromiso en la Iglesia, esta canción puede marcar momentos clave de oración personal. Puede utilizarse también para ambientar tiempos de adoración o silencio orante.
IMPORTANTE: Los momentos y usos de las canciones se deben consultar siempre con el celebrante.